Con el tema de escoscar me ha venido a la cabeza cuando había más vida en el pueblo. Mientras estábamos escoscando, se iba acercando la gente y ahí estabas un rato de capazo, había algunos que aún se sentaban y se ponían a escoscar también. Era como un punto de reunión en los días malos o de lluvia.
CAPAZO: dícese de entablar una conversación larga y espontánea con una persona, normalmente suele suceder cuando son personas que no se ven en un tiempo y se encuentran por la calle y repasan obra y milagros de los intervinientes, conocidos y de lo que surja.
Jajaja, no. Pero a ver, el otro cacharro para mi padre ya es muy pesado y para cambiar las ruedas y las fresas es un culo de cojones. Así por lo menos podrá ir haciendo alguna cosilla.
Bueno, pues ya hemos hecho la visita por dos comercios centrándonos en dos marcas: Stihl y Honda. Hemos empezado preguntando por aparatos de segunda mano pero hemos acabado desechando la idea, no queremos un aparato que se nos averie a los dos días.
En la casa Stihl había 3 modelos, mini, medio y normal. Hablando de normal de un aparato que haría más menos la misma labor que el que hace ahora.
La cosa es que lo queremos para un terreno ya labrado por el aparato que tenemos ahora, un poco para preparar la tierra para plantar o quitar la hierba, entrecavar patatas...
En la casa Honda había unos 7 modelos, mini, menos mini, 3 más o menos iguales y uno normal. En este caso nos hemos centrado en el menos mini, chiquitín, para tierras ya trabajadas.
Modelo Stihl: Pros: 700€, 84 de ancho de trabajo, 3 velocidades. Contra: manillar largo.
Modelo Honda: Pros: ligero, es un Honda. Contra: 900€, pongo muy en duda la labor que pueda hacer en terreno poco trabajado. Poco ancho de trabajo (dos fresas por lado).
Tras un rato deliberando, se ha decantado por el Stihl, a lo cual ha añadido que también nos tendrán que dar los zapatos de seguridad que estaba mirando (😂😂)