Me agobia la gente que te dice: Yo no sé estar parado, siempre tengo que estar haciendo cosas. ¿Cómo puedes estar ahà sin hacer nada?
Pues muy bien, oiga, haga lo que le salga de sus partes nobles, pero deje a los que estamos perfectamente capacitados para no hacer nada, tocarnos los cojones cuando nos venga en gana.