Definitivamente hay alguna especie de maldición, o algo por el estilo, sobre el festival de la Calle Angosta. Son conocidas las tormentas que siempre ocurren cuando empieza el evento. Esta vez, parece que el clima fue juntando bronca durante la pandemia, tiempo durante el cual no se realizó la fiesta, y se vino con toda la furia en el día inaugural. Hizo mierda toda la ciudad, autos, viviendas. La gente ya esta pensando en juntar firmas para que deje de celebrarse o se cambie la fecha.
Que se yo... Cosa de mandinga.