Pues resulta que el pnv, nuestro sacrosanto escudo protector de las tradiciones, la ley vieja y toda la vasquituz desde el Adur hasta el Ebro, quiere destruir el barrio más antiguo del municipio de Getxo, con caseríos de 500 años, para dar un pelotazo urbanístico con viviendas de lujo de la hostia.