Los dos reales decretos ley que han sacado esta semana en materia de jubilación son dos reales decretos mierda. Ala, ya lo he dicho.
Las condiciones para jubilarte más tarde cobrando más -un cuatro por ciento anual, frente al siete por ciento de prejubilación- o para jubilarte por discapacidad son tan estrictas que nadie va a poderse acoger a ellas en la práctica.
Eso sí, quedan muy monas en el BOE, sobre todo en medio de una campaña electoral donde nos pretenden tomar por gilipollas de nuevo.