La presencia de nitratos en el agua supera la permitida en 11 pueblos de Valladolid. De confirmarse por laboratorios homologados supondría que el agua no sería acta para beber de acuerdo con lo indicado por la Organización Mundial de la Salud y por la normativa vigente.
Los ecologistas sostienen que la contaminación tiene su origen principalmente en el uso masivo de abonos nitrogenados en la agricultura, especialmente en el regadío, y en la proliferación de macrogranjas intensivas.