¿Es en serio?
Lo voy a decir así, porque me parece verdaderamente asombroso. La gente que no tiene ni un clavo en el bolsillo tiene el valor de juzgar tan duramente a alguien que se ha aventado al emprendimiento en áreas donde ni el mismo gobierno gringo ha querido como el aeroespacial, donde pocas empresas incursionan porque no quieren ningún tipo de riesgo como en los coches eléctricos o similares, así como en áreas nunca antes exploradas a nivel comercial como la red Starlink, donde bastó un loco para que otros quisieran intentarlo.
No, yo no apruebo muchas de las decisiones de Musk. Starlink es la muerte de la astronomía como la conocemos, pero el tipo es sin duda extraordinario, una mente fuera de lo común. Hay que reconocerlo.