Aunque los pingüinos suelen desplazarse en grupos, muchas especies son monógamas, eligiendo una pareja con la que se aparean durante varias temporadas o incluso toda la vida.
Una vez al año, regresan al mismo lugar de anidación, y a pesar de pasar tiempo separados, pueden reconocerse entre sí por sus vocalizaciones únicas.
Es este fuerte vínculo y la lealtad hacia una pareja lo que ha llevado a considerar a los pingüinos como símbolo de fidelidad y amor en varias culturas.
#tux