¿Puede haber algo más peligroso que alentar una falsa sensación de control?
Pues esa putada le hicimos a toda una generación al nombrarlos “nativos digitales”.
Mucho más prudente hubiera sido llamarlos “turistas digitales”.
Para mí, hablar “digital” nivel nativo sería entender el funcionamiento de un ordenador, de internet, de su industria, de sus leyes, algo de programación, diseño web, manejar bien fuentes autorizadas, saber formarte en su evolución técnica.
¿Y qué sabían los “nativos digitales” para ganarse tan dudoso elogio?
¿Usar una PS4? ¿Una tablet? ¿Una SmartTV? ¿TikTok?
Para mí, eso equivale a las competencias de un turista, no de un nativo: Expertos en buscar placeres, estímulos, compras; expertos en ser los clientes. Expertos en ser los productos.
Pero la etiqueta triunfó. Cómo no. Seduce. Te hace sentir listo. Te hace sentir que tus hijos son listos. Audaces. Next Generation.
Y así es como bajamos la guardia.