"A lo largo de la última década, el aumento del precio de los alquileres ha sido 2,3 veces superior al aumento de la renta de los hogares. Literalmente el alquiler se come nuestro salario lo que obliga a buscar mecanismos de supervivencia como el pluriempleo, aceptar trabajos penosos, compartir casa, volver al hogar familiar o no poder independizarte. En definitiva, decisiones laborales y habitacionales involuntarias que empeoran nuestras condiciones vitales.
Los gobiernos, a todos los niveles, han sido cómplices de esta situación."
https://www.elsaltodiario.com/tribuna/rentismo-precariedad-laboral-batalla-no-podemos-aplazar