Tras ver cómo un usuario de Mastodon se está deshaciendo de sus productos de Apple, poniéndolos a la venta, me viene a la mente un sentimiento agridulce en torno al último dispositivo de Apple que compré, el MacBook Air M1, que fue como la guinda del pastel de mi relación con Apple (tras el iPhone Xr, el iPad 2018 y el Apple Watch SE). Fue como llegar a la cúspide de la pirámide en la que tantas veces quise escalar y llegar a lo más alto.
Ahora, a falta de tres cuotas por pagar del MacBook Air, siento un cierto arrepentimiento por haberme embarcado en esa compra de 1.300 EUR. Ahora que estoy convencido de que mi destino no está en la rígida y cara Apple, me arrepiento de no haber comprado un portátil corriente de Lenovo, Asus o Acer, y haberle instalado cualquier distro de GNU/Linux.
Por otra parte, debo reconocer que, aunque el día que se estropee cualquier componente de este portátil de Apple estoy jodido y probablemente tendré que tirarlo a la basura (o llevarlo al servicio técnico), me decidí por instalarle Fedora Asahi Linux y estoy muy contento con mi experiencia software/hardware, ya que el MacBook Air sigue teniendo un hardware premium.
En conclusión, voy a sacarle el máximo partido a este dispositivo hasta que se muera. Eso sí, no lo voy a usar con macOS, sino con GNU/Linux. La experiencia está siendo muy buena y al menos eso me alivia un poco el arrepentimiento.
Hoy en día ya estoy totalmente fuera del ecosistema de Apple y soy mucho más feliz y libre. Es un engaño del que se puede salir.