Uno de los ritos anuales de mastodón es la Necroporra.
Sí, apostamos a muerte.
Cómo a algunas personas este humor entre negro y macabro les molesta, ofende o excita hasta el grado de reportar la actividad; y cómo algunos administradores de instancia se erigían en policías de la moral o de lo políticamente aceptable en los límites de sus personales filosofías; de unos años hacia acá acontece todo con candado.
Si quieres saber más puedes seguir el perfil que lo gestiona:
@Mastoporra