Hubo un tiempo en el que impartía cursos jotline de poesía, fue una época hermosa pero muy exigente, los cursos iban bien y pronto me quedé sin tiempo y la poesía, tan importante para mí, se hizo otra cosa sin dejar de ser lo que estalla y nos hace reventar. Así que terminé por dejarlo en cuanto pude permitirme prescindir del dinero que me aportaba.
Pero qué buena gente conocí y qué orgullo cuando me hacen llegar sus trabajos y me recuerdan que supe dejarles en la querencia algo, un pequeño poso de mi vivir en poesía.
Somos capaces de conectar, de buscarnos, de acompañarnos hacia lo desconocido, conviene que no olvidemos eso, que lo pongamos en un lugar visible, que nos salte a la conciencia cuando todo sea inercia. Recuerda que también estamos preparadas para el misterio y la belleza.
¿Qué me decís de la tarjeta para la dedicatoria? He sido moshuelo desde hace ya musho tiempo. Y Marietta lo ha sabido captar y así me lo manda. Muero de ternura.
Que la poesía nos lleve, querides. Que nos mantenga despiertos y curiosos, juntas y capaces de estampida, resistencia y mordisco.
Os beso emosionaíto...