Me considero una persona con bastante imaginación, pero ni en mis más febriles delirios hubiese imaginado ver al fokin presidente de los EEUU anunciando Teslas delante de toda la prensa porque la empresa de su co-presidente se hunde en ventas y en bolsa. El autoproclamado "líder del mundo libre" rebajado a un vendedor de coches.
Cada vez más convencido de que la relación de estos dos no es de amistad ni mutuo interés, y que Musk tiene mucha mierda sobre Trump y le está coaccionando.