El propio Senado del gobierno EEUU admite que las máquinas de votación electrónica NO SON SEGURAS, algo que se viene alertando desde hace años y las empresas se hacen las suecas. En un informe sobre el ataque "ruso" al sistema de votación estadounidense, el Senado dice que la suerte no fue la seguridad de los sistemas sino que hay tantos y tan diferentes que realizar un gran cambio de votos habría sido muy complejo https://www.burr.senate.gov/imo/media/doc/RussRptInstlmt1-%20ElecSec%20Findings,Recs2.pdf