A la mayoría de las luchas les sobra entusiasmo y les falta estrategia. No podemos ser puro hígado, hay que utilizar el cerebro para elegir qué batallas enfrentar y cómo hacerlo.
Un ejemplo, las pintas y vandalismo durante las manifestaciones, si se sabe que eso generan mucho rechazo y realmente no le suman casi nada a algún movimiento ¿por qué defenderlo? Y no es que te importen más las paredes que los muertos no cosas excluyentes.
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Alletta 🌪 (alletta@mastodon.club)'s status on Friday, 01-Jun-2018 15:29:48 UTC Alletta 🌪 -
Alletta 🌪 (alletta@mastodon.club)'s status on Friday, 01-Jun-2018 15:34:09 UTC Alletta 🌪 Por supuesto que puedo entender el enojo y la frustración que se siente, pero para que cualquier movimento triunfe hay que convencer a la gente.
Por eso es que defiendo el construir a partir de las coincidencias.
¿Puedo renunciar a rayar paredes y romper vidrios a cambio de un mayor apoyo de la sociedad? ¿Qué pierdo contra qué gano al ceder en algún tema? -
Alletta 🌪 (alletta@mastodon.club)'s status on Friday, 01-Jun-2018 15:40:17 UTC Alletta 🌪 Es obvio que hay puntos "no negociables" pero desde mi punto de vista las formas no lo son. Hay que adaptar el cómo comunicamos el mensaje de acuerdo al receptor.
Actuemos de forma más eficiente, busquemos lograr más con menos recursos, se trata de sumar voluntades de convencer y no de imponer ideologías.
Al final tenemos que llegar a un punto que nos beneficie a la mayoría, aunque no sea tal cual lo deseamos porque tenemos que aceptar que también podemos equivocarnos.
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