Ciertamente, en países como México, en los cuales existe un claro substrato multicultural, el privilegio de una lengua por sobre las demás constituye un atentado contra la diversidad cultural de sus habitantes.
La imposición de un idioma es la base para consolidar lo conquista ideológica. De ahí, por ejemplo, que el imperio norteamericano esté tan interesado en hacer del suyo el único, y por ende, el más hablado.
Por otro lado, la reivindicación debe hacerse sobre la base del derecho de estas lenguas (como defensa de su cultura) a existir, así como de la integración de la sociedad a través del respeto a sus diferencias