Y si a los 26.000 hombres enviados a Panamá en diciembre de 1989 para capturar a Noriega y controlar esa ciudad tuvieron que luchar a brazo partido durante dos semanas para lograr su objetivo, ante un pueblo indefenso y unas fuerzas armadas sin equipamiento, la opción militar implicaría, en el caso de Venezuela, un riesgo enorme de re-editar un fiasco como Playa Girón. (fus)