Vargas Llosa, uno de los defensores más acérrimos del status quo en Hispanoamérica, se envuelve en su premio Nobel de literatura para descalificar de un plumazo toda lucha legítima. Como buen conservador utiliza la palabra 'libertinaje' para tachar todo lo que pueda amenazar los privilegios de quienes los ostentan y que muchos vemos como una lucha por la libertad. Así escribe sobre Julian Assange el mismo personaje que defiende instituciones tan anacrónicas como las monarquías, el machismo y el neoliberalismo.
https://elpais.com/elpais/2012/08/24/opinion/1345819181_800344.html