No tengo nada contra los creyentes pero, hubiera preferido que nunca salieran de sus templos. Es una muestra de "fe" innecesaria para mí. Ni modo. La ley permite que hagan sus peregrinaciones y los demás nos las aguantamos.
Cuando salimos a las calles a manifestarnos por las causas que consideramos realmente justas, ahí si habían quejas ciudadanas y echaban al ejército o a la policía.
Creo que hay desequilibrios severos.