Aquella noche de 1848 el joven Jules llevaba puesto su único traje, aquel que cuidadosamente se turnaba con su amigo Eduoard Bonamy para frecuentar alguna que otra tertulia de ambiente literario e intelectual de París.
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mikelalasmuto (mikelalasmuto@mastodon.social@mastodon.social)'s status on Wednesday, 24-Jul-2019 08:50:24 UTC mikelalasmuto
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mikelalasmuto (mikelalasmuto@mastodon.social@mastodon.social)'s status on Wednesday, 24-Jul-2019 08:51:23 UTC mikelalasmuto
Trataba que su vestimenta no delatara frente a los tertulianos su origen provinciano nantesino, y menos aún su apretada situación económica. Muchos días solo se alimentaba de pan y leche, escasa asignación que recibía de su padre la utilizaba para pagar el alquiler de una modesta habitación en el barrio latino (habitación que también compartía con su amigo Bonamy) y, sobre todo, para comprar libros y más libros, indispensables para quien, como Jules, pretendía ser un gran dramaturgo.
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mikelalasmuto (mikelalasmuto@mastodon.social@mastodon.social)'s status on Wednesday, 24-Jul-2019 08:52:48 UTC mikelalasmuto
– Seguro que usted ha cenado muy bien esta noche
– Perfectamente joven, nada menos que una tortilla de tocino a la nantesina -respondió el desconocido
– Las tortillas a la nantesina de París no valen nada. Hay que echarles azafrán, ¿entiende? -interrumpió Jules
– ¿Así que sabe usted hacer tortillas, joven? -preguntó el caballero
– ¿Que si sé hacer tortillas, señor?, sobre todo me las sé comer. -
mikelalasmuto (mikelalasmuto@mastodon.social@mastodon.social)'s status on Wednesday, 24-Jul-2019 08:52:55 UTC mikelalasmuto
– ¡Es usted un insolente! Y le exijo una satisfacción. Aquí tiene mi tarjeta. Vendrá el viernes a mi casa a cocinar usted mismo una tortilla
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