«[..]las consecuencias sociales de esta crisis van a ser dramáticas. La ciudadanía ya está pidiendo un Plan de Choque Social, donde el Estado dé una respuesta diferente a la del austericidio de 2008, [..]los centros sociales cumplimos y cumpliremos una función vital.
.. somos lugares de encuentro, organización y lucha para las vecinas de Madrid. Lugares donde los movimientos sociales pueden trabajar para perseguir mejor sus objetivos de transformación social. [..]»