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1. tlapil (tlapil@todon.nl)'s status on Sunday, 06-Mar-2022 02:40:11 UTC tlapil

   El caso de la violación sexual en grupo, cometida en Pamplona, por una banda conocida como La Manada, nos hizo aborrecer la mentalidad reaccionaria de la derecha.

   Ahora ha sucedido algo igual de repulsivo, en Buenos Aires; a plena luz del día, en la calle, seis hombres violaron a una joven, que fue rescatada por gente del vecindario. La policía llegó para defender a los violadores que iban a ser linchados. Un dato que debe resaltarse es que los agresores militan en la izquierda, incluso uno impartía talleres de "feminismo y nuevas masculinidades", además que no es la primera agresión sexual que cometen.

   También me entero que, para ocultar los gritos de la mujer agredida, dos de los agresores tocaban sus guitarras y cantaban. Los imagino entonando canciones de Silvio Rodriguez y Residente, mientras cometían sus crímenes.

   ¡Qué inmundicia!

   • tlapil (tlapil@todon.nl)'s status on Sunday, 06-Mar-2022 11:23:19 UTC tlapil

     • Gabriel

     @gabriel Releí tu mensaje. Veo que tu afirmación que agrego condimento de color al suceso, no es solo sobre la guitarras, sino especialmente por la militancia izquierdista de los violadores. Te hago algunas aclaraciones.

     Según testimonios de feministas amigas de los agresores los seis participan en la movida izquierdista, uno es el más destacado pues es cuadro del partido encargado de instruir a la militancia sobre antipatriarcado, los demás pertenecen a la base.

     De modo que evadir la responsabilidad de la izquierda es imposible.

     Repito que el izquierdismo debería autocriticarse, en vez de realizar maromas para exculparse, de lo contrario está llamado a convertirse en el reflejo invertido de la derecha; el brazo zurdo del sistema de dominio.

   • tlapil (tlapil@todon.nl)'s status on Sunday, 06-Mar-2022 11:24:25 UTC tlapil

     • Gabriel

     @gabriel

     Tomado de La Sexta:

     "Este grupo de agresores tenía un modus operandi perfectamente organizado: dos de los hombres tocaban la guitarra fuera del coche mientras los otros cuatro violaban a la víctima en el interior. Tocando el instrumento tapaban los gritos de la víctima. Los detenidos se iban turnando: unos salían a tocar la guitarra y los demás continuaban con la brutal violación"