La desconexión digital es un derecho. Fuera de tu jornada laboral la empresa ni puede ni debe contactar contigo, pero la mejor forma de evitar tentaciones es no darles la posibilidad. Cuando termina tu jornada apaga el ordenador, apaga el móvil y vive tu vida.
Y no te configures el correo del trabajo en tu móvil personal. No vas a heredar la empresa, asúmelo de una vez.