No voy a ver "Argentina 1985" en el cine, porque yo esa pel铆cula la vi.
La patota de la triple A buscando armas en mi casa en el '74 es uno de los primeros recuerdos que tengo. La mejor amiga de mi mam谩 que me regalo mis primeros juguetes y desapareci贸 en el 76. Yo lo vi.
Vi el alegato de Strassera por televisi贸n a los 14 a帽os, pedacitos porque no lo pasaban. Le铆 el "Nunca m谩s" a los 16, y me caus贸 un horror mil veces mayor que "El caso del Sr. Valdemar", porque era real. Me pas贸 a m铆.
Recuerdo Semana Santa, mi pap谩 que siempre fue apol铆tico superado por el estr茅s, terminando el cieloraso del living en una tarde, a los martillazos, para descargar la bronca y el miedo. Lo viv铆.
Los polic铆as con itakas en la calle, a mis 18, las razzias, la colimba. El Punto Final, la Obediencia Debida, los indultos. Llor茅 con los indultos.
Los genocidas por la calle, los torturadores como gobernadores, intendentes y diputados. Etchecolatz burl谩ndose de Alfredo Bravo en televisi贸n. La muerte de Carlos Auyero, en directo en horario central. No me lo cont贸 nadie.
Y los juicios por la verdad. Y la confesi贸n de Scilingo, y los juicios de Baltazar Garz贸n. Y la sociedad mas heroica del mundo que nunca par贸 de luchar por lo que es justo. Que hizo lo que ning煤n otro pa铆s hizo nunca. Lo vi pasar.
Hebe y Estela. Estela y Hebe. Y todas las viejitas.
Y lleg贸 la justicia. La anulaci贸n de los indultos, de las leyes del perd贸n, de la impunidad. Y los juicios. Y las condenas. Y la cara de derrota de Videla tras las rejas del cami贸n celular que lo llevaba a la c谩rcel. Como si fuera hoy, lo vi y lo sigo viendo.
Y tambi茅n, yo lo v铆 bajar los cuadros. Porque muchos presidentes pudieron elegirlo, antes, pero no lo hicieron. Yo lo vi.
Con todo, no es m茅rito de ning煤n gobierno, ni es obra de ning煤n fiscal, es la sociedad argentina que logr贸 algo mucho m谩s grande de lo que se admite capaz. Por una vez, reconozc谩monos lo bueno.
As铆 que no, que vayan los centennials a ver una pel铆cula, a beber una versi贸n lavada de lo que llev贸 cuatro d茅cadas, con h茅roes convenientemente muertos y verdades absolutas y apolitizadas. Eso no es para m铆.