Estos días estuve jugando a los fontaneros antes de irme a trabajar. Cambié el mecanismo de una cisterna porque perdía agua. Con el nuevo también pierde porque vete a saber tú cuál es el verdadero problema.
Como la llave de paso de la cisterna no funcionaba, hoy corté el agua de toda la casa y fui a cambiar la llave de paso. Es fácil: desenroscar la vieja y enroscar la nueva. ¿Verdad que sí? ¡Pues no! No había manera de que la puta llave entrara en la puta tubería. Si la ponía recta, tras dar uno o dos giros se salía. Solamente se quedaba trabada si entraba torcida.
Tras más de media hora intentando meterla bien decidí apetarla torcida hasta donde pude. Probé y aún salía un hilito de agua. Quise seguir girándola una vuelta más y solamente pude darle media. Al abrir el agua ya no salía un hilito, no, salía un chorro.
Al sacarla, pese a haberle dado como cinco vueltas para meterla, salió tras solo dos vueltas y media.
Si alguien me lo explica, soy todo orejas (bueno, ojos, que esto va por escrito).
Tampoco fui capaz de volver a colocar la llave anterior. Esa casa tendrá el agua cerrada hasta que venga un fontanero, coloque la llave, la gire sin ningún problema y me cobre por ello.
Tengo las manos doloridas para nada y me cago en todo lo que se menea.
🤬🤬🤬🤬🤬