La verdad sea dicha, los alfajores y la carne argentina son mejores.
En lo demás, puede ser que los productos más típicos (dulce de leche, leche y alguna boludez más) sean mejores los uruguayos.
Ahora, Artigas...
Su testamento (discutido por algunos historiadores medio "conservadores" tanto de Uruguay como de Argentina =donde el porteñaje lo detestaba-) empieza textualmente así:
"Yo, José Gervasio de Artigas, argentino de la Banda Oriental"
Sí. Años atrás, hinchaban por cualquiera que jugara contra Argentina, no es una exageración. Lxs uruguayxs más jóvenes tienen un honesto cariño por Messi. Pero no por la selección.
Ya lo dijo Galeano: el amor de Argentina por Uruguay es un amor no correspondido.
No soy trostkista. Tampoco tengo nada contra las ideas de Trostky (dicho sea de paso, fue a quien el mismo Lenin propuso como continuador del proceso cuando él muriera y advirtió que no debían dejar que Stalin lo sucediera).
También soy de los que entiende que Stalin fue un genocida.
Marx estableció las bases teóricas para comprender cómo llegamos al capitalismo y cómo funciona. Pero no hay ni una línea en sus textos donde explique cómo sería una sociedad comunista. Hay generalidades acerca de, más o menos, qué debería ser y qué procesos sociales, materiales e intelectuales deberían darse para ello, incluyendo las dificultades y peligros que presentarían un proceso de transición "socialista" hacia el comunismo.
La teorización de Lenin, es de Lenin sobre su interpretación de Marx aplicada al contexto histórico-social de Rusia a principios del siglo XX.
En el mejor de los casos, me considero "marxista", pero no "marxista-leninista".
Jaime Roos en el estadio Centenario de Montevideo, 26/11/2022
Anoche fuimos al concierto de Jaime Roos, y volví conmovido y feliz por tanta música, por haber estado allí con Cami (una amiga) y @santiago (mentor y amigo al que amo y respeto mucho).
La experiencia me dejó sin palabras. Cuánta música...
Para comprender la importancia y el impacto de la obra de Jaime en la cultura musical uruguaya hay que pensar en la figura de Charly García. A ese mismo nivel. Ni un poco menos. Incluso resulta difícil imaginar que algunas de las banda más populares de Uruguay pudieran siquiera existir de no haber sido por los aportes a la música de Jaime (especialmente La Vela Puerca y No Te Va Gustar).
Sus canciones son himnos, uno detrás de otro. Con la particularidad de que no destacan por su sencillez. Tienen estructuras musicales complejas, cambios de tonalidad, arreglos que denotan la evidente (y más de una vez declarada) influencia de los Beatles, y más notoriamente aún del candombe, elemento definitorio de la historia e identidad musical del país.
Mi amiga Camila, que "nunca lo había escuchado" (en el concierto descubrió que conoce algunas de sus canciones desde que nació) y que no le gusta la música en español, quedó fascinada con las letras, con las historias que tejen, las imágenes que evocan. Pero sobre todo con la música.
Y con los músicos.
La banda de Jaime es, literalmente, una selección de los mejores músicos de este país. No es una exageración. Desde los hermanos Ibarburu (Martín en la batería -enorme- y Nico en las guitarras -un prodigio y sin dudas el mejor guitarrista uruguayo de las últimas décadas-) hasta las voces, entre las que destaca Freddy "el Zurdo" Bessio (probablemente la voz más conmovedora y potente de la música popular uruguaya junto con la del ya fallecido "Canario" Luna), pasando por los tambores y la percusión a cargo de algunas de las figuras más trascendentes del candombe.
Simplemente, descomunal.
Gracias, Santi, por haber compartido conmigo este momento de tanta música y las lágrimas (parecíamos niños llorando de emoción, felicidad y asombro).
Gracias, a Jaime por existir y sobre todo, gracias a la vida, que nos dio a Jaime y su música.
La libertad como derecho es un invento humano, no algo natural.
La libertad como facultad o capacidad de elegir, sí es parte de nuestra condición humana y sobre ella rigen las mismas reglas físicas que sobre cualquier entidad que existe en este universo.
No te gustan las normas de convivencia de una instancia, te mudás a otra o te quedás calladx, o hacés lo que quieras y te hacés cargo de las consecuencias de tu elección.
Voy a intentar ser claro al respecto, aún a riesgo de ser torpemente sintético.
El fascismo es un movimiento político que tiene unas características fundamentales: - rechaza los conceptos de "lucha de clases", "liberalismo", "socialismo" y "democracia"; - adopta, como forma de organización política, el totalitarismo, esto es, el Estado como única institución que concentra todos los poderes, generalmente a través de un partido único, conducido por una única persona o líder; - y sostiene el corporativismo como doctrina política (intervención estatal en las relaciones económicas a través de corporaciones que las regulan) basado sobre todo (aunque no únicamente) en los principios de "Patria", "Orden" y "Tradición".
Estas características, a su vez, determinan otros aspectos centrales del fascismo: es radicalmente nacionalista, rechaza toda forma de oposición política y pensamiento crítico de sus doctrinas e ideas y es profundamente militarista.
Fascista es una persona que adhiere a este movimiento. No otra cosa.
En mi experiencia, tanto política como de vida, me ha tocado padecer un régimen con esas características. Y solo he conocido a una sola persona, una sola, que se reconocía como fascista, afiliado al Partido Fascista italiano, absolutamente consciente y militante. Uno de los abuelos fallecidos de mi hija mayor. Una persona increíblemente inteligente y con la tuve un montón de debates al respecto y también una cantidad de coincidencias en otros aspectos. Los dos tuvimos la honestidad intelectual para reconocernos radicalmente distintos y discutir horas (literalmente) sin jamás faltarnos el respeto aún cuando el intercambio se ponía más que caliente. También sabíamos que en un contexto diferente, no íbamos a dudar en pegarle un tiro al otro si las circunstancias histórico-políticas lo requerían. Eso también lo conversamos mucho.
Me parece que, igual que a cualquier persona que tiene inclinaciones políticas de "izquierda" se le suele llamar despectivamente "comunista", llamamos "fascista" despectivamente a cualquiera que tenga tendencias o actitudes de "derecha". Esto es un problema. Primero, porque no existe actualmente una definición precisa de qué es "izquierda" o qué es "derecha". Segundo, porque algunas características que se suelen vincular al fascismo o la derecha, las tenemos todxs. No lidiar con esas contradicciones es hacerse el boludo y ser cultural y políticamente funcional al capitalismo.
Cuando unx observa, en líneas generales, qué define al fascismo, se encuentra con que más de una experiencia política de las que se suelen llamar "socialistas" encajan bastante bien. Empezando, en la actualidad, por Corea del Norte. El período posterior a la muerte de Lenin en la URSS, con Stalin al mando, también. Claro, dicen combatir al "capitalismo" y allí radica la única diferencia conceptual (cosmética además) con el fascismo italiano.
Me parece de un reduccionismo muy peligroso (además de una forma de pereza intelectual) llamar a cualquiera fascista porque no estamos de acuerdo con ciertas visiones y elecciones políticas. Muchas personas a las que categorizamos como "fachxs" no tienen realmente ni puta idea de lo que significa fascismo. Pero les decimos así y las censuramos porque es menos trabajo que intentar argumentar nuestras propias posiciones y reconocer nuestras propias contradicciones. Y que se entienda que no estoy negando al fascismo ni estoy sugiriendo que no existen fascistas o que hay que charlar con ellxs educada, respetuosa y fraternalmente. No. Estoy diciendo que no podemos colgarle la etiqueta a cualquiera que no sea comunista, feminista, que no se dedica a las ciencias, que no sea atea, que no reconozca la lucha de clases, que no use GNU/Linux, que no reconozca o simpatice con las luchas de las minorías y un montón de cosas que nosotrxs entendemos como "buenas" sin haber intentado una aproximación racional.
La diferencia entre los buenos y los malos, decía Nietzsche, es que nosotros siempre somos los buenos.
Por lo demás, coincido totalmente con lo que expresa Severian por lo que no voy a repetirlo. Y Severian y yo tenemos diferencias profundas y hasta radicales en un montón de aspectos, pero no se me ocurriría nunca llamarlo fascista de buenas a primeras por eso (y sospecho que él a mi tampoco) porque entiendo que no tenemos ninguna de las verdaderas características que definen a un "facho". Y porque ambos hemos padecido en carne propia el fascismo y no se parece en nada a las pelotudeces que dicen algunxs energúmenxs con los que hay que lidiar en la vida.
Un ser humano empieza por existir, se encuentra, surge en el mundo y después se define. Un ser humano es porque empieza por ser nada. Solo será después y será tal como se haya hecho. Así pues, no hay naturaleza, porque no hay dios para concebirla. El ser humano es el único que no solo es tal como se concibe, sino tal como se quiere y como se concibe después de la existencia; un ser humano no es otra cosa que lo que se hace.#música #filosofía #política #disroot